Varias medidas se utilizan para medir los ingresos de una operación de cultivo durante un período determinado de tiempo: ingresos brutos en efectivo sean la suma de todos los recibos de la venta de los cultivos, ganado, y granja relacionadas con bienes y servicios, así como todas las formas de pagos directos del gobierno. Los ingresos brutos de la finca son igual a ingresos brutos con la adición de ingresos nonmoney, tales como el valor de consumo de alimentos de producción propia y el valor locativo bruto imputada de las viviendas de la granja. El ingreso neto de efectivo es ingresos brutos menos efectivo gastos tales como alimentación, semillas, fertilizante, impuestos a la propiedad, intereses de deuda, salarios para contratar mano de obra, contratar mano de obra y alquiler a los propietarios de nonoperator. Los ingresos netos de la finca son renta agrícola bruta menos los gastos en efectivo y los gastos no monetarias, tales como consumo de capital, requisitos previos para contratar mano de obra y los gastos del hogar rural. Los ingresos netos de la finca son una medida de plazo más largo de la capacidad de la granja para sobrevivir como un negocio viable de ingresos, mientras que el ingreso neto en efectivo es una medida de plazo más corta de cash flow.